"Todo se cruzara cuando menos te lo esperas"

Mi madre acababa de volver a casa y Claudia estaba durmiendo. Yo me había terminado de arreglar lista para salir. No tendría que quedar con él pero el amor...ais...el amor es el amor...

Eran las 15:22. Salí de casa. Fui hacia el parque en el que habiamos quedado. Llegué a las 15:43. Vale.Si, llegaba tarde, pero esque no había podido salir antes. Vi a alguien de pie dado la vuelta. Reconocí su cazadora y fui por detrás y le abracé.

-Hola, siento el retraso-dije sonriendo

-Hola amor- dijo sin darse la vuelta. Tenía la voz rara, bueno, rara no, que yo creo que no era su voz- Estoy un poco afonico y tengo la voz rara, ya lo sé.-dijo antes de que pudiera preguntar sobre su voz.

Suspiré.

-Siento lo de ayer...bueno...estaba muy estresada por todo, ya sabes...lo nuestro...-paré de hablar. Se había dado la vuelta.

-Hola Carolina.¿No te alegras de verme?-dijo una voz que yo reconocía perfectamente.

-Laura-dije apenas en un susurro con la voz ahogada.

Respiré jadeante. Me llevé las manos a la cabeza. ¡¿Qué?! Tenía que estar soñando, si, por la cuenta que me trae tenía que estar soñando.

-Yo...yo...eh...-intenté decir, pero no sabía que decir, no tenía ninguna excusar para haberme liado con su ahora ex novio.

-No. No te hagas la tonta conmigo ahora.-vi su semblante endurecido, pero sabía que por dentro estaba muy triste y con muchísimas ganas de llorar.Sus ojos delataban que había estado llorando-No...no me esperaba esto de ti...de ti no. Sabía que habíais sido alguna de nosotras pero pensé que había sido María. Es verdad que ella me lo había dicho pero Sandra también lo sabía y creí que había sido ella, pero que lo había dicho para intentar liarme, pero entonces vi sus mensajes, tus mensajes. Estábamos en gimnasia y le íbamos a gastar una broma a uno quitándole la ropa, ya que estábamos en natación, pero entonces vi que el movil de Nacho empezó a sonar porque tenía un mensaje y...entonces lo vi...y...-paró ya que se le llenaron los ojos de lagrimas.

Yo sabía el resto de la historia. Ella era la que había contestado cuando yo le había dicho: "Yo también teamo." Mis ojos también se llenaron de lágrimas.Ella no merecía esto. Yo era la culpable de que ella estuviera así. Entonces él no sabía que ibamos a quedar, o que se suponía que ibamos a quedar, ni que le había enviado ese mensaje. Respiré hondo.

-Laura...lo...siento...lo siento de veras...no...no quería...

Me interrumpió.

-¿Hacerme daño? Por favor...¿Creías que no me iba a enterar?¿Eh?-dijo.

-Anda...Hola chicas,¿Qué haceis aquí?-dijo una voz que también reconocia perfectamente a mi espalda.

Me giré cuidadosamente. Alzó una ceja al ver mi cara, asique supuse que tenía cara de horror o algo por el estilo.

-Esto...¿Ocurre algo?-dijo confundido mirándonos alternativamente.

Entonces me fui casi corriendo, dandole un empujón con mi hombro al  pasar por su lado. Intentó detenerme congiéndome del brazo pero sacudí fuertemente el brazo para que me soltara. Entonces empecé a correr y noté las lagrimas que caian por mis mejillas.

Es tan simple, que lo hacemos mas dificil para solucionarlo.

Me desperté.Tenía un dolor de cabeza insoportable. Me daban mareos. Y tenía la tripa revuelta. Mi madre apareció por la puerta con un vaso de agua y una pastilla. 

-Tómate esto.-parecía agitada-Son las 9:30, me tengo que ir a trabajar, te quedas con Claudia.Te quiero, mejorate, te llamaré más tarde.

-¿Donde esta Claudia?-pregunté.

-Durmiendo, pero no tardará en despertarse.

Asentí. Me sentía atontada.Me dio un beso en la frente y desapareció. Entonces recordé que hoy era jueves, que esta noche había estado vomitando y que ahora mismo debería estar en el instituto. Respiré. No quería pensar en nada. Cerré los ojos y me dormí.

El llanto de una desesperada Claudia me despertó.No había dormido mucho. Como mucho 15 minutos. Salí de la cama y me fui a su cuarto.Estaba llorando en su nueva cama como una posesa. La cogí entre mis brazos y su cuerpo se adapto perfectamente. Se tranquilizó con el simple hecho de estar en brazos. La acuné y en unos minutos dejó de llorar. Bajé a la cocina. Preparé el biberón de Claudia mientras ella estaba en la trona. Terminé de prepararle y se lo di. Lo cogió con sus pequeñas manitas y se lo empezó a beber. De repente sonó mi telefono móvil. Estaba en la cocina cargándose. Era Laura. Lo cogí.

-¿Carolina?

-Sí

-¿Dónde estas?¿Por qué no has venido a clase?¿Estás mala?

-Estoy en casa, bien y mala, mareada, con dolor de tripa y de cabeza.

-Oh, lo siento, mejorate.Besos.

-Gracias.Besos.

Colgó.Respiré. Recibí un mensaje. Era de Nacho.

Carolina, lo siento, mejórate, no estes mal por favor, contesta. Besos. Teamo.

¡Aj!.Volví a dejar e movil en la mesa y me centré en Claudia. Noté que la pastilla me hacía efecto ya que estaba mejor. 

A los diez minutos me llegó otro mesaje. Nacho otra vez.

Carolina, me porté fatal y me arrepiento, se por lo que estás pasando y lo siento. Teamo. Por favor contesta.

¡Aj!otra vez. Claudia se terminó el biberón 7 minutos después. Al terminarlo empecé a aplaudir y a darla la enorabuena y a hacer el tonto y el bobis con ella. La cogí. Me llegó otro mensaje. No hace falta ni que diga quien es.

Carolina, por favor ,da al menos señales de vida, di algo, por favor, contesta. Teamo.

¡Aj!.

-Tu hermanita esta muy confusa, sí, muy confusa, y no sabe que hacer-dije con la voz a la que se les suele hablar a los niños pequeños dirigiendome a Claudia.

-Manita, bababa gugu, aaa, gu, apa, manita.-dijo Claudia. 

Tenía casi un año y ya se la entendían palabras. Yo hacía lo posible para que aprendiera más cosas pero era inútil. Sonreí. Contesté a Nacho: Yo también teamo.Sonreí.Al segundo me llegó otro mensaje.Nacho: A las 15:30 en el parque.Estarás mala, pero no lo suficiente como para no verme.Teamo.

Me rei tontamente. Sonreí. 

-Tu tonta hermanita se está metiendo en la boca del lobo-la dije a Claudia.

-Tíí.Manita obo-sonrió inocentemente. La sonreí. La toqué la nariz y la besé la frente.

"Diferente, si, soy diferente, pero por eso me quieren".

Al llegar al instituto había mucha gente por el pasillo de taquillas, como siempre, supongo, pero me sentía agobiada por todo el mundo. Divisé a Laura, María, Sandra y Natalia. No me apetecía ir con ellas, por primera vez, pero tenía que ir, no quería dar el cante. Ellas vieron que iba hacia ellas y sonrieron, yo sonrei a su vez mirándolas. Todavía estaba a la mitad del pasillo y ellas estaban casi al final.
Me choqué con alguien. Típico, con mi asombrosa patosidad y mi descuidadez...
-Lo siento, perdón.-dije mirando hacia el suelo. Me sonrojé.
-No es nada-¿Qué?Esa voz...
-Nacho...-dije en un susurro.
-Carolina-dijo serio y como asintiendo.
-Oh...yo...
-¿Qué?
-Lo siento
-¿Por qué?
-Por lo que te ha pasado con Laura...yo...lo siento...tendria que haberme pasado a mi tambien y...
-Shhh-susurró en mi oido.
Me dio un beso en la mejilla.
-A las 7 en el parque, no me falles-volvió a susurrar-Te quiero.
Pasó por mi lado. Giré un poco la cabeza por donde se había ido. Volví a la realidad y me di cuenta de la cara que tenía. La sustituí por una sonrisa."Te quiero".Oh dios mio. Era tan...dulce...le amaba. Miré a Sandra, Natalia, Laura y María. Estaban mirando con cara de extrañadas y de asombro. Sonreí.
Fui hacía ellas.
-¿Qué a pasado?-Natalia
-Nada, me he chocado.
-Has tardado mucho- María
-Le he pisado sin querer y me he disculpado, me he puesto nerviosa...
-¿Quién era?-Laura.
-No sé, uno de otra clase, no me acuerdo de su nombre.
-¿Vamos a clase?-Sandra.
Asentimos. Fuimos a clase de biología. Hoy íbamos al laboratorio. María se puso con Laura, y Sandra se puso con Natalia.Yo me senté en la mesa con distintos instrumentos de laboratorio sola, detrás de Laura y María. Nacho llegó unos segundos después de que sonara el timbre. No había sitio. Mierdas. Yo estaba sola. Vi como el profesor le hacía un gesto para que ocupara el asiento vacío que había a mi lado. Iba a ser una clase muy larga. Laura le observo como con asco hasta que se sentó a mi lado.
Durante la clase no hacía mas que mirarme. Yo echaba una miradita de vez en cuando pero enseguida me giraba al ver que él me miraba. Cuando hacia eso se reía. Laura echaba de vez en cuando alguna mirada envenenada hacía nosotros y María me miraba como: Eres una pobre estúpida.
Tocó el timbre y salí corriendo hacia mi taquilla. No té que él también salía corriendo.Me agarró de la muñeca y me dio la vuelta.
-¿Cuánto tiempo vas a seguir así?-dijo aún sujetándome la muñeca.
Mis ojos se llenaron de lagrimas y en un esfuerzo en nulo salieron a borbotones.
-Se lo diré-casi chillé-Déjame.
Me fui corriendo y salí del instituto.

"Las personas somos tan tontas que no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos"

Claudia me despertó con su llanto a las 6:30 de la mañana. No estaba nada cansada y no me apetecía volverme a dormir, asique fui hacia el cuarto de Claudia. Estaba berreando en su cuna. O bien había tenido una pesadilla, o bien tenía hambre(poco probable), o bien no encontraba su chupete. El chupete estaba a su lado, se le habria caido por empezar a llorar. La cogí en brazos. La acuné y me la llevé a mi habitación. Al cabo de un rato se tranquilizó. Cerró sus ojitos y se durmió. La toqué con un dedo su mejilla suave y rosada. Era tan guapa. Tenía unos preciosos ojos grandes y verdes. Su pelo era rubio, precioso, parecía oro.Lo tenía todo rizado y la llegaba por el hombro. Nunca había dejado que se lo cortaran y gracias a mi lucía ese precioso cabello. Miré el reloj, eran las 7:12. No quería volverla a dejarla en su cuna. Estaba tan bien posicionada en mis brazos. Su figura era tan perfecta sobre mis brazos...Me tumbé en mi cama y la dejé a ella pegada a mí. La rodeé con un brazo para que no se despegara de mi y la contemplé. Al cabo de un rato miré el reloj, era las 7: 33. Me incorporé en la cama y cogí a Claudia. La llevé a su cuna y cerré la puerta de su habitación.
Hice lo mismo que cada mañana. Hasta que salí de casa a las 8:17. Por el camino no me encontré ni a Sandra ni a María. La verdad es que me lo esperaba, despues de lo de ayer...Lo de ayer, dios, no me había vuelto a acordar.¿Qué va a pasar ahora?.¿Y si Laura lo sabe?. Bueno, es justo que lo sepa, él es su novio y yo su mejor amiga...
Me encontré frente a la puerta del instituto cuando paré de pensar y reflexionar.Miré el reloj: 8:26.Entré en el instituto. Fui hacia el pasillo de taquillas, había muchos estudiantes, normal, quedaban 4 minutos para que empezaran las clases.
Avancé a lo largo del pasillo. Al lado de las taquillas de Laura, María, Sandra y Natalia estaban ellas con Nacho. Laura estaba de frente a Nacho y estaban como discutiendo y las demás estaban detrás de Laura, cabizbajas. Me acerqué.María y Sandra me fulminaron con la mirada cuando me vieron llegar. De repente todos me estaban mirando, 10 ojos puestos en mi. Miré a Nacho. Luego a Laura.
-Hola Carolina, por fin llegas, tenía que contarte algo.-dijo Laura.
-Ho...hola-dije forzando una sonrisa-¿Qué ocurre?
-Nacho...Nacho...se ha liado con otra chica mientras que estaba saliendo conmigo, más exactamente ayer.
Me quedé petrificada. Moví los labios para pronunciar un: ¡Oh!, pero solo moví los labios.
Miré a Nacho. ¿Qué estaba pasando?
-¿Y sabes quien es la chica?-conseguí pronunciar aún mirando a Nacho.
-No, pero me encargaré de averiguarlo.-respondió friamente Laura.
-Consideralo un favor-susurró María en mi oído.

¿Es real o solo estoy soñando?Que alguien me pellizque, es urgente por favor

¿Qué?
-Creo que...
-No, no sigas, no, esto...esto no esta bien...yo...no debes continuar, no.
-¿Por qué?
-Eres el novio de mi amiga, de Laura, eres su...novio...y por mucho que yo te quiera no quiero hacerla daño,no,no,no.
Tenía que escapar.Me di la vuelta y comencé a correr. Una mano me aferró el brazo. Me resistí. Intente soltarme.
-Espera.
Me dio la vuelta. Me agarró por detrás y me besó. Mis manos fueron a su cuello y mis labios cedieron.¡Oh!.Era...era como estar en el cielo...era simplemente perfecto, sus labios perfectos que ahora estaban sobre los míos. Fue un beso perfecto. Pasional.
Duro unos cinco minutos. Me separe de sus labios. Quería más. Volví a posar mis labios en los suyos.
Me separé de él de repente. Miré a nuestro alrededor. Estábamos en clase. No había pensado hasta ahora en el lugar que estábamos.
En clase estaban María y Sandra mirándonos boquiabiertas desde el otro lado de la clase. Nacho también se dio cuenta y noté que se separó un poco. ¿Qué había hecho?
-María, Sandra, yo...
-No digas nada-dijeron a la vez.
Salieron de clase. Una angustia me recorrió por dentro. Las lagrimas estaban a punto de salirse de mis ojos. No quise luchar contra lo que de verdad sentía en ese momento asique dejé que rodaran por mis mejillas. Nacho se dio cuenta. Me abrazó sin decir nada. Esto no podía ser real.

Ese recuerdo de nuestro beso prohibido♥

Me levanté como cada mañana a las 7:30. Esa noche si que había dormido, y bastante, a pesar de lo eufórica que estaba, no soy de esas personas que cuando las ocurre algo como eso no tienen otra cosa en que pensar, no duermen, no hacen nada solo por ese recuerdo...Bueno, haber seamos sinceros, como yo diría, sincerémonos(si, a veces digo palabras que ni siquiera se si existen), no he dejado de pensar en ello, pero si que he dormido, pero he soñado con él, con nuestro beso...
Me fui hacia el armario.Cogí unos vaqueros y una camiseta azul a rayas de media manga. Me vestí. Me peiné. Me arreglé.Bajé a desayunar. Cogí una taza, el colacao, la leche, unas galletas y me prepare el desayuno.Me tomé el desayuno. Las 8:10. Entraba a las 8:30. Como era la única que me había despertado, ya que mi hermana pequeña, tiene un añito y mi madre la lleva a la guardería a las 10:30, se levantan ambas a las 9:00 o así, y mi padre depende del día, pero antes de las 8:30 él no se levanta, me fui sin despedirme de nadie, hoy no me apetecía despedirme de las paredes como de costumbre.
El instituto estaba a 10 minutos de mi casa, asique me iba andando, normalmente, me encontraba a alguna de mis amigas, como a María o a Sandra. Natalia tenía que ir en bus asique nos la encontrábamos a la puerta junto con Laura. A los dos o tres minutos me encontré con María, y un poco mas alante, con Sandra. Al cabo de unos minutos más llegamos al instituto. En la puerta no estaban ni Laura, ni Natalia, lo cual nos extrañó. Entramos en el instituto para ver si estaban dentro. Llegamos al pasillo de taquillas y allí tampoco estaban, miramos la clase que nos tocaba, fuimos allí y tampoco, pero sin embargo, en clase estaba Nacho. Se me aceleró de repente el corazón. Avanzamos hacia él.
-¿Por qué no ha venido Laura?-preguntó María.
-Está mala-respondió él.
No parábamos de echarnos miraditas de apenas un segundo, ya que en seguida retirábamos la mirada.
-Entonces supongo que Natalia también-dijo Sandra.
-No tiene porque- intervení.
-Ya.-dijo seguido de un bostezo.
Observé que Nacho nos estaba mirando mientras hablábamos. Asique Laura y Natalia malas, que casualidad, lo de Natalia no, lo de Laura, demasiada casualidad.
-¿Podemos hablar un momento?-dijo de pronto Nacho.
-Emmm...si, claro.-respondí sorprendida-Ahora vuelvo-las dije a Maria y Sandra.
Fuimos a una punta de la clase donde no había nadie.
-Creo que sabes porque hemos venido aquí a hablar.
-Me hago una idea.
-Bien...bueno...principalmente... quería hablarte sobre...
-...el beso...
-Exacto...emm...yo..
-Nacho, se lo que me vas a decir: Fue una equivocación, no sabia lo que hacía, y me arrepiento, ya que yo estoy con Laura y eso está mal. He besado a su amiga. Y si no es mucho pedir, me gustaría que no se lo dijeras.Y yo te respondería: ¡Oh! Claro, si, fue una equivocación, y no, no se lo diré.
-En realidad...no es exactamente eso, bueno...creo que estoy empezando a sentir algo por ti.

Y al fin llegó la cita...

No comi. Directamente no tenia hambre, aparte habia judias verdes. Odio las judias verdes.

 Estaba nerviosa.Histerica.No podia quedarme quieta un minuto seguido. Si no estaba moviendo la pierna o la mano, estaba dando vueltas por mi habitacion, o si no abriendo cada dos por tres el armario a ver si elegia algo que ponerme de una vez por todas. ¿Que le iba a decir? Bueno, principalmente explicarle las matematicas. Jamas habia pensado que una asignatura que tanto odiaba me pudiera hacer quedar con el chico de mis sueños. El chico de mis sueños. Que bien sonaba. El chico de mis sueños. De mis sueños, solo de mis sueños, no es mi chico. Eso me frustraba bastante. No podia besarle, no podia decirle lo mucho que le queria, era...el novio de mi amiga y el chico de mis sueños. Sin darme cuenta, varias lagrimas rodaron por mis mejillas. Gimoteé como una niña que habia perdido su muñeca. Miré el reloj: las 17:45. Me sequé las lagrimas. Fui hacia un espejo que tenia en mi habitacion. Me mire. Me di cuenta de que asi estaba bien, no necesitaba cambiarme, para ponerme otros vaqueros y otra chaqueta o sudadera que me hiciera parecer igual, pasaba. Medio sonrei al espejo.

-Tu puedes, solo es una clase de matematicas, no vas a hacer nada de lo qeu te arrepientas-le dije a la chica reflajada en el espejo. Volvi a sonreir.Me quedé mirandome en el espejo. 

No sé cuanto tiempo habia pasado pero de repente sono el timbre asi que supuse que eran las 6. Me volvi a mirar bien al espejo. Baje las escaleras, fui hacia la puerta y la abri. Si, era él. Tan guapo como siempre. Sonriente. Perfecto. Vi que estaba un poco mojado. Mire mas alla de donde estaba él y vi que llovia un poco.

-Pasa-logré decir

-Gracias

Pasó.

-¿Llueve mucho?

Yo sabia cuanto llovía pero bueno, por sacar tema...

-No, que va.

-Bueno...¿comenzamos?

-Ah, claro, si, las matemáticas.

-Mmm...claro.

Subimos a mi cuarto. Nos sentamos en la cama. El me empezó a plantear sus dudas. Yo se las intente explicar y, al parecer, lo entendió.

-Pues muchísimas gracias, eres la mejor.

Sonreí.

-De nada.

La mejor.Estaba mas histérica que antes.Me miró un buen rato.

-¿ocurre algo?

-Oh, no, lo siento...Es que..bueno...no era nada...da igual.

Le mire interrogante.

-Es que...-empezó diciendo.

-¿Es que?

-Eres...bueno...eres...perfecta...

Me quede petrificada.¿Que?¿Como? Había dicho que yo, dios, que yo era, que era hermosa.¿Yo?¿A mi?

-¿Que?-fue lo único que pude decir.

Esto seguro que seria una broma, si, una broma.De muy mal gusto, pero una broma al fin y al cabo.

-Oh...yo...

-¿Que has dicho?-dije medio histérica.

-Creo que me...

No acabo la frase. Se acerco a mi. Me besó.

Al principio quería quitármele de encima, pero entonces enredé mis manos en su pelo. Él me agarró por la cintura. Nos estuvimos besando bastante rato.Cuando separamos nuestros labios hice un intento por volver a besarle, pero me di cuenta de que eso estaba muy mal, bastante mal.